CON DIOS NUNCA TE SENTIRÁS SOLO

“Aunque mi padre y mi madre
me dejaran, con todo, Jehová me recogerá” (Salmos 27: 10)
Cuando mi madre murió, mi
hermana Mary Carmen la más pequeña, solo tenía 6 años de edad. Y nosotros sus
hermanos éramos muy jóvenes. Con los años nos dimos cuenta que ella a pesar de
ser adulta no aceptaba la muerte de mi madre, y sentía como si ella la hubiera
abandonado. Todos la queremos mucho, pero para ella no era suficiente, el amor
de una madre no se puede suplir. Ella es una mujer muy valiosa, y tiene muchos
dones y cualidades que el Señor le regaló, pero ella no lo sabía, no quería
escuchar mucho de Dios; creía que Dios le había fallado al quitarle a su madre,
¿Cómo puedes explicarle a una niña pequeña que el dolor y el sufrimiento
siempre existirán, y que aparentemente no tienen respuesta? Pero lo que si
puedes hacer es hablarle del Amor de Dios y que a pesar de todo… el Señor la
ama, y en medio de todo ese dolor, Él está ahí, Él la sustenta y nunca la
abandonará.
Eso exactamente fue lo que
logro aprender con el pasar de los años, ¡ella entendió el Amor de Dios y un día
acepto su amor!, estudio su Palabra, confió en Él, y le entrego su vida; fue una
entrega que lleno todo su ser, comprendió muchas cosas, y ahora Mary Carmen sabe,
que cuando Cristo venga, podrá encontrarse con nuestra madre, abrazarla y
entregarle el amor que ha tenido guardado para ella. Ahora ella sirve al Señor
trabajando en su Ministerio, Feliz de haber conocido al Dios de su Madre, ese
Dios que ha cuidado de ella desde siempre, ahora entiende que no está sola, que
hay muchos que la amamos, y que el Señor siempre ha tenido un plan para ella,
sabiendo que pase lo que pase, Dios estará con ella hasta el último día de su
vida, (Mateo 28: 20).
Que este día tu oración sea:
Gracias Señor, porque sabemos cuánto nos amas, y que pase lo que pase tú
siempre estarás con nosotros, pero también sabemos que un futuro hermoso estás
preparando para tus hijos, te rogamos por todos aquellos que perdieron a sus
Padres en circunstancias especiales y sienten algún vacío en su alma, te
rogamos que puedan conocerte, que alguien les hable de ti, y que puedan saber
que tu cuidas de ellos (Salmos 68: 5),
todo esto te lo pedimos en el nombre de
Jesús, Amén
Que
Dios te bendiga.