PROMESA DIVINA

“Nosotros esperamos el cielo nuevo y la tierra nueva que Dios
ha prometido, donde todo será bueno y justo” (2 Pedro 3: 13 TLA).
¿Te gustan los animales? ¿Te
gustaría poder jugar con un tigre o con un elefante? ¿Te gustaría vivir cada
día disfrutando de todos los animales de la creación con la certeza de que son
tus amigos? A mí me encantaría, por eso anhelo estar en la tierra que Jesús nos
prometió, rodeados de animales, flores y lugares hermosos viviendo todos juntos
en armonía. Como dijo David en Salmos: ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es
habitar los hermanos juntos en armonía! (Salmos 133: 1).
Como ya les he contado
anteriormente pasé un día interactuando con aves exóticas de diferentes
especies y fue muy agradable. Sin embargo no es posible convivir con ciertos
animales ya que este mundo de pecado nos obliga a mantenernos alejados de los
animales salvajes. Pero nos queda la esperanza de la promesa de Jesús, de un
cielo y una tierra nueva.
Querido amiguito, te invito
a que vivas con la esperanza del regreso de Jesús. Ora cada día para que puedas
llegar a alcanzar la vida eterna y ayudar a otros a tener esta esperanza.