HAY QUE SUMERGIRSE 2

Puedes estar en lo más alto del éxito de esta vida, a pesar de haber
alcanzado todo lo que te has propuesto, aunque siempre hay algo que te falta,
si te pones a analizar tu vida podrás darte cuenta qué es lo que te falta, todo
lo que vives es parte de la enseñanza para tu futuro. No importa el puesto, el
poder que tengas o la posición en la que te encuentres actualmente siempre te
hará falta algo.
Es aquí cuando el consejo de alguna persona, ya sea cercana o desconocida
puede venir de repente y sugerirte qué es lo que te hace falta en tu vida,
tendrás dos opciones, la primera será aceptarlo y buscar esa opción que te
falta, la segunda sería rechazarla y seguir viviendo en la ignorancia de tu
vida. Dios utiliza personas cercanas o distantes para anunciar tu mensaje
importante para tu vida.
Es probable que Dios te tenga que enviar a un lugar, a un punto o a un
sitio en el cual probablemente no te sientas cómodo, cuando decides tomar la
decisión de empezar, te darás cuenta que las cosas empiezan a ponerse un
poquito difíciles, te darás cuenta de que aparentemente no encontrarás de forma
rápida lo que buscas, pero es el principio del cambio que va a enfrentar tu
vida.
Quizás quieras ofrecer tus bienes materiales a cambio de encontrar la
paz, la esperanza, la alegría, entre otras características que buscas para tu
persona. Cuando llegue el momento exacto esperas encontrarte directamente con
quién va a restaurar tu vida y de pronto te darás cuenta que las cosas no son
como las esperabas, Dios utilizará a una tercera persona si es posible para
comunicarte el mensaje que Él tiene para ti, tienes dos opciones, la primera
opción es actuar como Naamán y pensar que tu posición no te permite humillarte
para experimentar un cambio. La segunda opción es aceptar la recomendación de
Dios y empezar a vivir la vida conforme a su voluntad. Querido joven el enemigo
no estará contento si decides aceptarla segunda opción.
Siempre hemos querido que las cosas de Dios sean de una manera fácil y
sencilla, es aquí cuando entran en juego otras personas que Dios tiene
preparadas para que te ayuden a tomar una decisión. En el caso de Naamán fueron
sus soldados, en tu caso podrán ser amigos, familiares o alguna persona que
Dios designe para tal acción. Cuando reconozcas que las cosas podrían ser mejor
si decides aceptar la segunda opción, entonces decidirás bajarte del caballo de
la vida y no compararas lo que pierdes por humillarte ante Dios.
No será fácil el enemigo también trabaja y buscara la manera de hacerte
desistir y veras que aparentemente no hay cambios, pero lo que no sabes es que
Dios está trabajando en ti, cuando salgas de la última sumergida, te darás
cuenta que hay un nuevo corazón en tu interior, que ya no vives tú, que las
cosas viejas pasaron y todo es nuevo.
Esta es la transformación que Dios te ofrece, para que suceda tienes que
decidir sumergirte en las aguas de Dios.