LA ARMONÍA FAMILIAR INTERRUMPIDA 4

CUANDO LOS HIJOS SE REBELAN
La educación de los hijos es la base
de sus vidas. El grave error de muchos padres es creer que los hijos se educan
en el colegio, que si el profesor es bueno los niños tendrán una buena educación;
déjame decirte que estás equivocado, la buena educación y el respeto se enseña
en casa. Los primeros siete años de los niños y las niñas es fundamental en su
educación. Es el deber de los padres que se dedique el tiempo necesario en la
educación esencial de los hijos, si se siguen buenas bases en su educación
llegaran a ser personas útiles para la sociedad.
Es
importante saber que la mente de los niños es más susceptible a las impresiones
buenas o malas, estos son los años donde el progreso de su educación los
llevara en buena o mala dirección, esta es la clase de educación que los hará
jóvenes idóneos para la vida práctica. “No
se puede exagerar la importancia de la educación precoz de los niños. Las
lecciones que aprende el niño en los primeros siete años de vida tiene más que
ver con la formación de su carácter que todo lo que pueda aprender en los años
futuros” (White. CN 177.1).
La
negligencia, como cumplir los caprichos o el consentimiento de dar lo que piden
los niños durante sus primeros años, es formar jóvenes con un carácter sin
valores y sin recursos tácitos para la vida.
Uno
de los grandes problemas al criar niños de este tipo, es que muchos suelen ser
hijos que maltratan a sus padres, se sublevan y la “autoridad paterna” es
inhibida. Hijos que causan problemas y afectan la armonía del hogar.
Cuántos
de nosotros hemos visto a niños que insultan a sus padres, niños manipuladores
y controladores, niños que no atienden las normas ni los límites establecidos y
en algunos casos cuando son mayores, hijos que golpean a sus padres -estos
casos se dan más hacia las madres-.
¿Cuáles
son las razones por la que un hijo actúa de esta forma?
La
educación de los hijos empieza durante el embarazo, es allí donde se le
trasmiten algunos “conceptos de educación”, el hablarle cuando está en el
vientre le estimula en el desarrollo neuronal y emocional, donde se empiezan a
crear los efectos del apego; según los médicos el feto crea emociones de felicidad
y de alegría, que le ayudan a desarrollarse mejor y a eliminar el stress y la
tensión. Esta acción dará como resultado que se sienta feliz y querido. Cuando ocurre
lo contrario en el embarazo y la madre lleva una vida de gritos y maltrato, hay
probabilidades de que el niño nazca y crezca con problemas emocionales que los
refleje en su conducta.
El
apego es una fuente importante en el desarrollo y la educación del niño, cuando
existe un apego a ambos padres, da la seguridad de que el niño respetara a sus
padres, el apego crea vínculos de relación, cuando ésta relación existe es
normal escuchar a un niño decir que su papá es el mejor o que su madre es una
heroína. Si el apego no ha sido el correcto, los hijos tenderán a dar menos
importancia a los que le rodean y se centraran en sí mismos, sin importar los
demás, sería como consentir a su yo encontrando satisfacción en lo que hace.
La
autoestima es un punto importante en los niños. Los niños que reciben palabras
de afecto, que reciben cariño de sus padres, que se les da su lugar en la
familia, pueden crecer con una mejor educación que un niño maltratado, golpeado
o quizá abusado. La autoestima en los niños es parte fundamental en la
educación, hacerlo de forma correcta, dará como resultado un niño feliz y
educado.
Estos
conceptos son importantes en el desarrollo de los hijos, los cuales son un
regalo de parte de Dios (Salmo 127: 3).
En la Biblia vemos la historia de Absalón, el hijo del rey David, Absalón
quería ser el nuevo rey de Israel, y no le importaba tener que matar a su
padre, él había buscado consejo de otros para saber cómo eliminar lo que él
consideraba una amenaza para su reinado, para satisfacer su necesidad de poder
tenía que eliminar a su padre. La historia cuenta que su padre decidió huir al
saber que su hijo había formado un ejército y que marchaban hacia la ciudad; al
huir el rey, Absalón se asentó en la casa del rey, buscando la forma de que su
ejército eliminara a su padre. La historia termina diciendo que los ejércitos
de ambos se enfrentaron y que al final Absalón terminó enredado con su cabello en
una encina donde el capitán del ejército del rey David lo mato.
Esta
historia es similar a la de muchos padres. Muchos prefieren aguantar los
insultos, los golpes o quizá hasta huir de sus hijos maltratadores. Si tú eres
parte o conoces a una familia que vive esta situación, es necesario buscar
ayuda con psicólogos, trabajadores sociales y sí es necesario avisa a la
policía para que actúe.
Dios
quiere que tengas paz y que la tengas en abundancia, pero tienes que entregar
tu corazón a Dios y permitir que Él pueda obrar en tu vida y pueda
transformarte en nueva criatura, si tú eres un hijo maltratador, inclina tu
cabeza ante Dios y pídele perdón a Él y a tus padres y respétalos para que tus
días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da (Éxodo 20: 12).
Que
Dios te bendiga y te ayude a ser mejor y a respetar a tus padres o para que te
ayude a educar y criar a tus hijos con una educación integral y de calidad, y
recuerda la educación comienza en casa. Quiero terminar con este versículo “Él hará volver el corazón de los padres hacia los
hijos, y el corazón de los hijos hacia los padres...” (Malaquías 4: 6), Solo Dios te puede ayudar.