VERDADES BIBLICAS QUE LLEVAN A LA RELFEXIÓN 8

"Oye, hijo mío, la
instrucción de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre"; " Hijo mío, si los pecadores te quisieren
engañar, No consientas" (Proverbios 1: 8, 10
RVR1960)
19. La mente es la parte más solemne y más
sagrada de nuestro ser. En la mente está la conciencia, lugar santo donde
desciende el Espíritu Santo para llevarnos al arrepentimiento y la santidad. La
mente es como un extenso y fértil terreno donde podemos sembrar árboles de
buenos frutos y flores de exquisita fragancia. Por otra parte podemos sembrar
hierbas y malezas venenosas que dañan, enferman y matan aun a otros. La mente
está sujeta a la seria e invariable ley de
la siembra y la cosecha, todo lo que sembramos lo cosecharemos. Desde
muy temprana edad estamos sembrando hábitos y actitudes que nos definirán como
vencedores o perdedores. Hay que desarrollar la obediencia, el respeto, la
responsabilidad, el aseo, la sinceridad, la honestidad, el agradecimiento, la
integridad y el dominio propio. Por otra parte hay que luchar y con la ayuda
divina vencer el egoísmo, la conciencia, la autocompasión, la melancolía, el pesimismo,
la flojera, la prepotencia, la envidia y todo rasgo de carácter negativo. En el
desarrollo del carácter, la selección de amistades, la lectura y las cosas que
vemos y oímos juegan un papel muy fundamental.
"¿Has
visto hombre solícito en su trabajo? Delante de los reyes estará;
No estará delante de los de
baja condición" (Proverbios 22: 29 RVR1960)
"De
más estima es el buen nombre que las muchas riquezas,
Y la buena fama más que la
plata y el oro" (Proverbios 22: 1 RVR1960)
"Ve a la hormiga, oh perezoso, Mira sus caminos, y sé sabio; La cual no teniendo capitán, Ni gobernador, ni señor, Prepara en el verano su comida, Y recoge en el tiempo de la siega
su mantenimiento. Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás de tu
sueño? Un poco de sueño, un poco de dormitar, Y cruzar por un poco las
manos para reposo; Así vendrá tu necesidad como caminante, Y tu pobreza como hombre
armado" (Proverbios 6: 6-11 RVR1960)
"Oye, hijo mío, la
instrucción de tu padre, Y no desprecies la dirección de tu madre"; " Hijo mío, si los pecadores te quisieren engañar, No
consientas" (Proverbios 1: 8, 10 RVR1960)
"La memoria
del justo será bendita; Mas el nombre de los impíos se pudrirá"
(Proverbios 10: 7 RVR1960)
"El
que anda con sabios, sabio será; Mas el que se junta con necios será
quebrantado" (Proverbios 13: 20 RVR 1960)
"No
te hagas amigo de gente violenta, ni te juntes con los iracundos, no sea que aprendas sus malas costumbres y tú
mismo caigas en la trampa" (Proverbios 22: 24-25 NVI)
20. Todos los seres humanos tenemos una vida
espiritual que atender y desarrollar hasta ser salvos. Estamos en este mundo
por muy breve tiempo. La vida es una corta etapa de prueba y preparación para
la eternidad. Es en este mundo donde decidimos nuestro destino eterno; una vez
muerto el ser humano no tiene ninguna otra oportunidad de salvación. Morimos
salvos o morimos condenados. Ninguna misa, ningún rezo, ningún culto religioso
puede alterar nuestro destino trazado por nosotros mismos durante la vida. No
existe ninguna reencarnación, no hay transmigración del alma, tampoco un
purgatorio; todo es una esperanza falsa y diabólica. Solo Jesucristo con su
sacrificio expiatorio en la cruz del calvario puede salvar al ser humano. Lo
único que se nos exige es tener fe en Jesucristo como hijo de Dios y nuestro
salvador; debemos obedecerlo, arrepentirnos y abandonar nuestros pecados.
"»Porque
tanto amó Dios al mundo que dio a su Hijo unigénito, para que todo el que cree
en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al
mundo, sino para salvarlo por medio de él" (Juan 3: 16-17 NVI)
"Ellos dijeron: Cree en el Señor Jesucristo, y
serás salvo, tú y tu casa" (Hechos 16: 31 RVR1960)
"Por tanto, amados míos, como siempre habéis
obedecido, no como en mi presencia solamente, sino mucho más ahora en mi
ausencia, ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor" (Filipenses 2:
12 RVR1960)
"Diles: Vivo yo, dice Jehová el Señor, que
no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que
viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos; ¿por qué moriréis, oh casa de
Israel?"; "Cuando yo dijere al justo: De cierto vivirás, y él
confiado en su justicia hiciere iniquidad, todas sus justicias no serán
recordadas, sino que morirá por su iniquidad que hizo" (Ezequiel 33: 11,
13 RVR1960)
Dios los bendiga.
Del folleto:
"VERDADES BIBLÍCAS QUE LLEVAN A LA REFLEXIÓN" del Pastor Efraín
Sánchez