OFRECE A DIOS TU GRATITUD

“¡Ofrece a Dios tu gratitud, cumple tus promesas al Altísimo! […] Quien
me ofrece su gratitud, me honra; al que enmiende su conducta le mostraré mi
salvación.” (Salmo 50: 14, 23
NVI).
En la vida hemos aprendido a ser agradecidos, cuanto más para Dios, Él nos
provee de todo lo que tenemos y de todo lo que necesitamos y más aún nos ofrece
la salvación, con más razón le ofrecemos gratitud por lo que nos da.
Algo que muchas veces descuidamos quizá es agradecer a Dios por lo que
recibimos de su mano, muchas veces adjudicamos estas cosas a nuestro proceder o
a nuestras actividades diarias, creemos que lo que tenemos lo hemos alcanzado
por nuestro esfuerzo y no nos damos cuenta de que en realidad son bendiciones
de Dios. El corazón del Señor rebosa de alegría cuando nos postramos de
rodillas y le agradecemos en el nombre de Jesús las bendiciones que hemos
recibido y le damos el lugar que le corresponde.
Ofrezcamos a Dios nuestra gratitud, porque de lo recibido de su mano
agradecemos. El Señor se siente honrado y feliz, por las palabras de
agradecimiento de las bendiciones recibidas. ¿Has agradecido a Dios sus
bendiciones de hoy?
Que tu oración este día sea: Querido Señor, hay tanto que
tengo que contarte y tanto que agradecerte que no me valdría la vida completa
para decirte gracias, tú conoces mi gratitud y hoy la ofrezco delante de ti, en
el nombre de tu amado hijo Cristo Jesús, Amen.